Más allá de la industria: incendios y frente frío deterioran el aire en Nuevo León

La industria pesada, la refinería de Cadereyta y los automóviles fueron señalados por el gobernador de Nuevo León, Samuel García Sepúlveda, como las principales fuentes de contaminación en el estado, aunque otros factores, como los incendios, también inciden en la mala calidad del aire.

La declaración de contingencia atmosférica por parte del Gobierno estatal se prolongó durante todo el día debido a la combinación de alrededor de 200 incendios recientes, la mayoría en terrenos baldíos, y la llegada del frente frío número 31 a la región.

La magnitud de los incendios registrados en Santa Catarina, García y Apodaca, además de un siniestro forestal en el cerro del Topo Chico, llevó a la intervención de Protección Civil, Bomberos, Conafor y demás brigadas de auxilio, pues testimonios indican que algunos pudieron haber sido originados por personas en situación de calle.

Debido a los fuertes vientos y tolvaneras que afectan la zona metropolitana de Monterrey, la Secretaría de Medio Ambiente declaró una alerta de contingencia por la elevada concentración de partículas menores a 10 micrómetros (PM10) y PM2.5 en el ambiente.

Este fenómeno, según la dependencia, está relacionado con el avance del frente frío número 31, que genera vientos con ráfagas de más de 60 km/h y moviliza polvo procedente de Texas y Coahuila.

Ninguno de los incendios está vinculado con la quema de basura ni fue causado de manera intencional, aseguró el gobernador, quien explicó que las fuertes rachas de viento ocasionadas por el Frente Frío y la sequía en el estado fueron los detonantes. “A diferencia de otros años, los vientos no llegaron acompañados de humedad como suelen hacerlo”, señaló Samuel García.

Junto con las medidas preventivas que el Observatorio del Aire dio a conocer por la contaminación del aire provocada por los incendios, se suma la resolución del juicio de amparo a favor del Comité Ecológico Integral (CEI), el Consejo Nacional de Litigio Estratégico y Escalada Libre en contra de la refinería de Pemex en Cadereyta.

Desde febrero de 2024, se promovió un juicio de amparo debido a las altas emisiones contaminantes de la planta de Pemex y su impacto en la calidad del aire de la Ciudad, lo que derivó en la sentencia emitida.

La Agencia Nacional de Seguridad Industrial y de Protección al Medio Ambiente (ASEA) no llevó a cabo la verificación del cumplimiento del programa ProAire 2016-2025, lo que, según el fallo, permitió que la Refinería opere de manera ilegal, señalaron integrantes del Consejo Nacional de Litigio Estratégico.

"El día de hoy (ayer) se nos notificó un fallo en el cual se concede el amparo", dijo Mariana Calderón Aramburu, del Consejo Nacional de Litigio Estratégico, "y se determina que la operación de la Refinería es ilegal y está incurriendo en diferentes violaciones a diferentes normativas, y se ordena a la ASEA que verifique el cumplimiento de la normatividad".

La calidad del aire en el Área Metropolitana se vio afectada debido a la persistencia del humo negro y el polvo en varios sectores.